OJO POR OJO, ESCARBADIENTE POR ESCARBADIENTE.
Durante los últimos años hemos sido invadidos. No hablamos de extraterrestres, ni alienígenas, ni siquiera por fuerzas norteamericanas en busca de petróleo mientras le dicen al mundo que lo hacen por la paz. La invasión es de palabra. Nos robaron la Ñ y nos metieron el candy bar, Halloween y San Valentín. Nos enseñaron el know how, nos colaron de prepo el coffee break, la heavy rotation, el pay-per-view y el personal trainer.
Antes que nos veamos festejando el dia de acción de gracias y la independencia el 4 de Julio, decidimos hacer una movida histórica. Un pequeño paso para el hambre, un gran salto para la argentinidad.
Volvemos al escarbadientes. Ni dental floss, ni enguaje mint-flavored. El viejo y querido arte de mondar. Cuando el tipo que junta huesos está pasando y uno ya se puso a hacer bolitas con la miga del pan que quedó, ahí se impone el palillo. Grasa, antihigiénico, pero cómodo como la puta que lo parió.
Nos llamaremos Lastweekend pero morfamos asado de tira como cualquiera. Porque la escarapela no se lleva en la solapa, sino en las entrañas.
Txt: Rodrigo Sabio.
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